La importancia de la vacunación en tiempos de pandemia
Muy buenos avances en el mundo ha presentado la vacuna contra el Coronavirus, a más
de un año de iniciada la pandemia, que ha dejado a millones de muertos y multitudinarias personas
contagiadas. Es por esto que el proceso de inoculación en la población ya ha comenzado, por
supuesto que, poniendo el énfasis en la población de riesgo, la tercera edad, enfermos crónicos y
los funcionarios de la salud.
La importancia de vacunarse, radica en que hasta el momento es la única herramienta
para controlar el virus, por su alta probabilidad de evitar que las personas se sigan enfermando. Si
bien es cierto, existe mucha desconfianza respecto al uso de esta medicina, en algunos casos por
desinformación, o simplemente por voluntad propia, es necesario dejar en claro que previo a la
administración de las
dosis en la población se han realizado diversos ensayos clínicos, con
resultados positivos y la aprobación de distintas entidades de salud como la OMS. Esto, provocaría
que la persona no se enferme de gravedad si es que contrae el virus, y evitaría propagar el
contagio hacia su círculo cercano.
Según la información de especialistas de la salud y de centros médicos, existen
condiciones para que algunas personas no se puedan vacunar, tales como encontrarse activo con
COVID-19, tener alergias severas, estar embarazada, niños y adolescentes menores de 16 años
(no en todos los países), personas con enfermedad febril aguda grave.
Las vacunas que más se han comercializado, siendo aprobadas por los organismos de
salud son Pfizer Biontech, que utiliza parte de la información genética del virus que entra a las
células del huésped, y produce la proteína Spike en el cuerpo. Sinovac es una vacuna de carácter
inactivo, que no será infeccioso para quien se le suministre, y podría producir una respuesta
inmune contra componentes del Covid-19. Y, por último, dentro de las más cotizadas se encuentra
Astrazeneca que utiliza el método del “vector viral”, y consiste en inocular un adenovirus con
material genético del SARS-Cov 2.
Los especialistas eso sí sugieren tener precaución posterior a la vacunación, ya que,
aunque se están implementando bajo las normas de seguridad internacional, la población aún
debe estar en proceso de observación para ver el comportamiento a lo largo del tiempo y la
efectividad de la vacuna. Lo cierto es que podrían generarse algunas reacciones después de la
inoculación, por consecuencia natural de la dosis, tales como: dolor, hinchazón o enrojecimiento en
el sector de la inyección, fatiga, dolor de cabeza, dolor muscular o articular, escalofríos, fiebre,
malestar, entre otros.
Tres tipos distintos de vacunas, que ya se están utilizando en el mundo y con resultados
prometedores. Aunque aún existe incertidumbre respecto al futuro de la pandemia, se puede ver
una luz de esperanza para acabar de manera segura con lo que fue una pesadilla para la
población mundial y la economía. En este punto, ya solo queda esperar y confiar.
Las fotos son de getty images.
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